- Nº1
La actual ermita, de estilo neobarroco, se inauguró en 1969 en Almonte, Huelva. Es el cuarto templo construido en el mismo lugar desde el siglo XIII. Su origen se remonta a una ermita medieval levantada por orden de Alfonso X. Ha sido reconstruida varias veces, especialmente tras el terremoto de Lisboa (1755).
- Nº2
Este azulejo es la representación cerámica más antigua de la Virgen del Rocío. Data de 1696 y estuvo en varias ermitas, siendo la última la Puerta del Sol. Daba acceso a la antigua Sala de los Milagros. Es una joya del patrimonio devocional y artístico.
- Nº3
Las marismas del Rocío son un paisaje natural único, parte del Parque Nacional de Doñana, donde se combinan humedales, dunas y bosques, hogar de una rica biodiversidad. La Ermita del Rocío, situada en el corazón de estas marismas, es un santuario de devoción, especialmente durante la Romería. La ermita es el lugar donde se venera a la Virgen del Rocío, centro de una de las peregrinaciones más grandes de España.
- Nº4
Diseñado por Juan Infante Galán, el retablo muestra escenas bíblicas como la Anunciación, el Bautismo y Pentecostés. Incluye figuras de doctores de la Iglesia, los apóstoles Pedro y Pablo y ángeles tocando instrumentos rocieros. Es uno de los elementos más simbólicos del santuario actual.
- Nº5
El dulce y sereno rostro de la Virgen del Rocío refleja la ternura y el consuelo que encuentra el pueblo en su mirada. Sus ojos oscuros y expresivos transmiten cercanía, esperanza y amor maternal. La Virgen es conocida como la “Blanca Paloma” y “Reina de las Marismas”, símbolos de paz y protección. Su expresión es uno de los rasgos más venerados por los rocieros.
- Nº6
La Virgen del Rocío es una talla gótica del siglo XIII, vestida con mantos bordados, corona real y ráfaga dorada. Sostiene al Niño Jesús en su brazo izquierdo y bendice con su mano derecha. Es conocida como la Blanca Paloma y Reina de las Marismas. Su imagen es el centro de una de las devociones marianas más multitudinarias del mundo.
- Nº7
El pocito de la Puerta de la Ermita, posiblemente un antiguo manantial natural, fue convertido en pozo tras la reconstrucción del santuario en 1758 para aprovechar sus aguas potables. Es uno de los afloramientos de agua más duraderos de la aldea y solucionó en su día la escasez de agua. Muy ligado a la devoción popular, inspira leyendas, coplas y canciones, como la de 1919: “Pocito del Rocío, ¡siempre manando! ¡Lo mismo que la Virgen: siempre escuchando!”.
- Nº8
El Niño Jesús, conocido cariñosamente como el “Pastorcito Divino”, está representado en actitud de bendición, con una mano levantada y la otra sosteniendo un pajarito o un orbe. Va vestido con ropas bordadas a juego con su Madre. Su gesto alegre y cercano es símbolo de la infancia divina y de la ternura de Dios hacia su pueblo. Es también muy querido entre los devotos.
- Nº9
La Sala de las Velas de la ermita del Rocío es un espacio de profunda devoción donde los peregrinos encienden velas como ofrendas y peticiones a la Virgen del Rocío. Cada vela representa una súplica personal, creando un mar de luz que llena el ambiente de recogimiento y esperanza. Este lugar, cargado de espiritualidad, ha sido trasladado desde el interior del templo a un edificio anexo, permitiendo a los visitantes participar en esta tradición de manera más accesible. La sala es un reflejo tangible de la fe colectiva y la conexión íntima de los devotos con la Virgen.